Mi lista de blogs

domingo, 16 de octubre de 2011

Sobre el tiempo (Cuatro locuras)

CELULAR


   No deja de mirar su celular. Tan inexpresivo, tan apagado, tan infame. Solo debe tomarlo y llamarla.
Todas sus dudas tendrían final en esa llamada, pero debe resistir y esperar, así pesa el tiempo. Él, incapaz de hablarle de frente hasta hoy. Ella, demasiado expresiva en sus sentimientos que lo intimida a Él.
   Somos compañeros, piensa Él, ni siquiera somos amigos. ¿Lo habrá pensado?
   Sentado, con la tele encendida, no la mira, sólo la escucha. Está apoyado de brazos sobre la mesa con la cabeza inclinada observando ese maldito celular. Llamala y sacate esa puta duda de una vez por todas, le dice la voz que lo acompaña desde que tiene noción de la vida.
   El silencio inunda la noche totalmente oscura y fría. Extiende la mano con intención de tomarlo pero se arrepiente rápidamente.
   Dejé pasar mucho tiempo y muchos momentos pero si no lo hago ahora perderé para siempre. La perderé a Ella. Quiero saber qué piensa de todo esto. Tengo que terminar lo que empecé ya pero tengo miedo.
   El miedo lo invade desde la última vez que le dijeron que NO en el amor. Teme que vuelva a suceder. Sería demasiado para su corazón que muy agrietado está. Pero también está echada la última carta. A todo o nada. Dijo que lo pensaría, que no se imaginaba nada de lo que le dije. Que necesitaba tiempo. Siempre es así. Un modo muy agradable de inyectarte el veneno sin que sientas dolor hasta que hace efecto.
   La luz del celular se enciende. Comienza a sonar una canción de Molotov. Es una llamada. Toma el celular y lee el nombre del llamante. Es Ella.
   Me está llamando. Pensó lo que le dije.
   Presiona la tecla verde y se acerca el auricular al oído.
   -¿Hola?


OSCURIDAD (PALABRAS METAFÓRICAS DE UNA IDEA ABSTRACTA)

   La luz se había extinguido de golpe. La oscuridad bañaba la tarde de verano. 
   El Sol había estado implacable hasta el preciso momento en que su luz simplemente desapareció, se extinguió. No había ni un sólo rastro de existencia de luz. No había electricidad. Las linternas, velas, celulares, ningún objeto emitía luz. Simplemente, había desaparecido. El miedo comenzó a trabajar y usurpar los cuerpos de los seres vivientes sobre la Tierra.
   El silencio acompañado de la oscuridad era el cóctel que más temor daba. No por el hecho de que haya silencio sino por el hecho de que se podía oír las voces del pasado al acecho de la mente de los pocos sobrevivientes. Las voces estaban más cerca y se las oía más fuertes. Las escuchaban dentro de sus cabezas. Podían sentir los latidos de sus corazones al ritmo de sus respiraciones y sincronizados con el sonido de las palpitaciones de las sienes.

   Hace tres días que la luz desapareció para siempre. Las plantas están muriendo. Los animales enloqueciendo y matándose los unos a los otros. La mayoría de los humanos han perdido la cordura (y los que no, pueden ver los fantasmas esperándolos pacientemente para llevarlos). El oxígeno se está agotando. Sólo es cuestión de tiempo para que la vida desaparezca de la faz de la Tierra.
   El tiempo dejó de existir para toda la eternidad. El infinito rodeó los cuerpos de los que se han ido y espera que el infierno ceda su lugar.


MENTIRA

   Es inevitable caer. Debemos tenerlo siempre presente; porque si uno quiere ganar, tiene que aprender a perder.
   ―La mentira es la que destruye la confianza con toda certeza.
   ―De eso no hay dudas.
   Lo que genera dudas es el funcionamiento de los pensamientos del mentiroso y, a veces, traidor. ¿Cómo puede estar confundido sin saber qué acto realizar? Le duele en el alma mentir pero siente una gran sensación de placer una vez que lo ha hecho. Es inevitable, el mal está en nosotros y nos genera placer dejarlo actuar, aunque después queramos sanarnos con actos de bien, todos buscamos un lugar en el cielo pero antes queremos conocer el infierno, por simple curiosidad.
   ―Tú sabías toda la verdad. Siempre la supiste y no me dijiste nada.
   ―Lo lamento, temía que la verdad te hiciera daño.
   ―Eso te hace cómplice de su mentira. Me ocultaste la verdad, siempre la supe, y también la oculté para que ustedes se hundieran aún más en su propia mentira, se les escapó de las manos.
   No existe cura para estas telarañas de mentiras y traiciones, porque todos son culpables. Todos son mentirosos y traidores. La mentira es como un virus que se expande entre los seres infectando la honestidad hasta límites insospechados.
   Tarde o temprano, la verdad se conocerá y, desde ese momento, otras mentiras nacerán; sólo debemos dejar actuar al tiempo, destructor de mentiras. Necesitamos las mentiras para vivir, para llegar al final de la vida creyendo que hemos sido inocentes de nuestras propias trampas.
   ¿Cabe la necesidad decir que todo esto ha sido una simple mentira?
   Mentira.


TE EXTRAÑO

   Oh, extraño tus besos y tu mirada.
   Mirada: llena de fuego, luz y alegría, no puedo olvidarla; ella es la gran fortaleza de tu belleza inolvidable. Perfecta, eterna, joven.
   Ojos: ¿qué ocultaran esos bellos ojos iluminados por tu alma que no conoce el tiempo? Mirarlos provocaba que me perdiera en un mundo profundo de amor, campos de vientos que susurraran tu nombre al oído; imposible olvidarte; imposible no extrañarte.
   Voz: aún puedo oírla en mi cabeza, puedo oír tus palabras disparadas hacia mí cuando te enojabas, gracias, pues era protagonista del momento, y tu voz pronunciando mi nombre con su suave y monótono sonido, dulce como la luna llena en una noche de primavera.
   Amor: es demasiado el amor que debo guardar para alguien que lo quiera, alguien que lo acepte. Esperaré pero nada evitará que deje de extrañarte, soy un hombre enamorado de una utopía del amor; enamorado de una diosa olvidada; enamorado de la noche, de la dulzura, de tu imagen perfecta.
   (No hay nada que me proteja ante semejante belleza, oigo a mi corazón galopar por los campos del amor refrescándose con los besos de tu aliento, gritando que jamás te olvidará, jamás podrá sacarse el nombre tallado a pasión de tu nombre; tu amor es la ceguera de mi olvido, nunca podré olvidarte. Tu nombre está marcado en mi memoria; siempre: TE EXTRAÑO.)



3 comentarios:

  1. ¡¡ Fantásticos !! ... Cuatro locuras con dos denominadores comunes: el tiempo como idea, y la excelente redacción de cada microrrelato...

    ResponderEliminar
  2. Es increíble la profundidad que hay en tus palabras. Detrás de ese guarro hay un poeta del carajo. Muchas veces lográs que al terminar de leer algo tuyo, esboce una sonrisa y diga:
    ―Qué hijo de puta, que bien se expresa.

    ResponderEliminar
  3. Gracias a los dos...
    A veces escribo algo por hacerlo, simplemente, para liberar alguna idea o sentimiento que te aflige el corazón, y ni yo me lo creo cuando lo leo un tiempo después... Esto es culpa del enamorado que habita dentro de mí... Gracias a los dos por ver la profundidad a la que quiero llegar... :)

    ResponderEliminar